En una acalorada sesión desarrollada ayer en el Concejo Deliberante de Ensenada, se aprobó un aumento del 55 % en las tasas municipales y se rechazó el pago de un bono de 2.000 pesos a fin de año impulsado por el Frente Renovador.
“A los gritos, Ensenada aprobó suba de tasas” informa el diario El Día y detalla que “En una sesión cargada de violencia verbal, amenazas de huevazos y hasta un concejal ‘invitando’ a una persona del público a ‘discutir afuera’, el Concejo Deliberante de Ensenada sesionó ayer para aprobar un ajuste en las tasas del orden del 55% y rechazar la implementación de un bono salarial de fin de año de $2.000 para los municipales propuesta por el Frente Renovador”.
Señala que “La oposición massista consideró ‘excesivo’ el ajuste en las tasas y a través de los ediles Marcela Lucena y Vicente Ignomiriello objetó que ‘si el gobierno nacional proyecta una inflación del 24%, no corresponde que en Ensenada las tasas aumenten un 55%’”.
Agrega que la edil oficialista Silvina Nardini “reaccionó cuando desde el arco opositor señalaron que el aumento generaba ‘malhumor social’ y contraatacó con que era ‘caradurismo’ hablar de ese presunto malestar” afirmando que “‘Mal humor había en los `90 cuando las tasas aumentaban y la gente no veía el resultado. Ahora se ven pavimentos, luces, calles y servicios que antes no había’”.
También consigna que “Durante el debate y al sostener su postura a favor del bono de $2.000, el massista Ignomiriello recibió insultos desde la barra y abucheos de los ediles oficialistas, marco en el que el edil opositor denunció que ‘nos van a tirar huevos pero yo me voy a ir caminando y vamos a ver si alguno de estos imbéciles se anima a decirme algo en la cara’”.